Mente obtusa
La espiral se va haciendo infinita, cada paso pareciera el
mismo que precedió como un GIF ad infinitum. Laberintos que lleva al mismo
lugar, caminos que topan con reminiscencias y experiencias ya vividas. Así es
una mente obtusa, ególatra por principio que, aferrada con tentáculos multicolor,
se adhiere y conecta a la conciencia, sin antelación, sin presentación. El tiempo
petrifica las conexiones, como cuando se endurece el cemento bajo el sol. A veces
cuesta trabajo respirar. A veces la repetición de eventos obliga la parálisis,
al entumecimiento de todas las extremidades. Petrificadas, duelen. Entre la inmovilidad
y la succión de forma simultánea intensifican el dolor directo en la
conciencia. Técnica sutil, imperceptible, evanescente pero no menos real y punzante.
Incisivo, sistemático ataca las neuronas, adormece y despierta, como la anestesia
donde intervienen con artefactos puntiagudos para cortar, separar, desprender,
causar dolor. Dolor de apego, petrificado en el tórax y todo el esqueleto óseo.
¿Cómo no salir apabuyado, aturdido, aplastado? ¿Cómo escapar del dolor de la
ruptura? ¿Cómo concentrar tal fuerza para semejante acto de voluntad? El corazón
se dilata y se expande, los riñones se estancan de tanta bilis: emociones
contenidas, palabras no dichas. Acciones perdidas como objeto de propiedad,
como cualquier cosa remplazada. ¡Ay! Grito … Grito, GRITO. Para que, con el estremecimiento
se rompan las ataduras tentaculares. ¡Ay! Vuelvo a GRITAR. Con ello apenas
logro un movimiento espasmódico, sutil, que provoca tan gran dolor y desmayo
por un momento. Quisiera la muerte que sentir aquel dolor tan fiero ¡…! No lo
vuelvo a intentar. La quietud me da cierto alivio. Siendo la petrificación y el
endurecimiento que me oprime. Así obtuso e incisivo, así con los tentáculos alineados
vueltos a petrificar continuo como el reloj, dando la hora puntual, sin
chistar, incluso, sin experimentar químicamente una emoción de la apelación. Mas
aún siento placer de atender la orden, de recibirla, causando cierta felicidad
en ella.
@muelcoco
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